Preparación de la materia prima: En primer lugar, el polvo mineral debe someterse a una preparación adecuada de la materia prima. Esto puede implicar pasos como: cribar, moler, mezclar o dosificar para garantizar que la calidad y composición de las materias primas cumplan con los requisitos.

Granulación húmeda: la granulación húmeda es uno de los métodos comunes utilizados en la granulación de polvo mineral. En este proceso, el polvo mineral se mezcla con una cierta proporción de agua u otros líquidos y se granula en húmedo mediante equipos como: agitación, pulverización o tamboreo. La mezcla forma gránulos en el proceso de agitación o tamboreo y se solidifica en gránulos mediante secado o curado. Generalmente, se utilizan líneas de producción de granulación de tambor rotatorio y líneas de producción de granulación de disco.

Secado: Después de la granulación, los gránulos generalmente necesitan secarse para mejorar su estabilidad y resistencia. Esto puede implicar pasos como secar, agregar agentes de curado o tratamiento térmico para solidificar o endurecer los gránulos.

Cribado y envasado: Finalmente, las partículas de polvo mineral granulado deben someterse a un cribado para eliminar las partículas que no cumplen con los requisitos de tamaño. Luego se envasan y almacenan.

Es importante elegir un proceso de granulación adecuado basado en las propiedades, requisitos y aplicaciones específicas del polvo mineral. Se pueden ajustar y optimizar diferentes procesos de granulación de polvo mineral según sea necesario para lograr los productos granulados deseados. La empresa EMCC puede proporcionarle soluciones adecuadas para sus requisitos específicos.